Cinco historias de medios digitales
Esfuerzo, ilusión y coraje. Son las características de los valientes que se lanzan a crear webs y revistas digitales en un tiempo en el que desaliento parece la principal amenaza contra el periodismo. El Congreso de Periodismo de Huesca se justifica por encuentros como el que cerró la sesión del jueves junto a los promotores de cinco iniciativas en Internet.
Javier Moya, fundador de la revista Don junto con otros dos amigos, lleva 15 años en la profesión y es un nativo digital sin traumas por el cambio de modelo. «En España apenas había medios pensados para dispositivos móviles», afirma para pasar a contar qué ofrece su publicación. «Es un periodismo pausado, cultural, de estilo de vida. Un pequeño nicho que en España no existía». La revista que dirige es digital, mensual y gratuita. Al equipo de fundadores le acompaña una pequeña plantilla de cuatro personas, que conforman la redacción. Sin embargo, los números están tan cuidados que llegan a participar en ellos entre 20 y 30 colaboradores. Don tiene cinco números de vida, sorprendiendo cada 30 días con su diseño multimedia.
El origen de EnCubierta está en Paula Corroto, una periodista que perdió su trabajo con el cierre de Público, donde era la encargada de la sección de libros digitales. Un día, comiendo con dos amigas, llegó a la pregunta clave: «Entre tanto oferta de libro digital, ¿cómo poder guiar a los lectores de España?». En marzo de 2012 empezaron los preparativos y para junio la página estaba creada. En ella, junto a reseñas y entrevistas, hay listados de libros por categorías. «El valor añadido de la revista es que te redirecciona directamente a la tienda para comprar los libros. Si te ha gustado alguno, con un click lo puedes comprar» dijo Corroto. Otro de los valores añadidos es su línea editorial: «No hablamos de todo. Hay una selección importante». Pero, como en todo inicio, no faltan las dificultades: «Por ahora no nos da de comer. Estamos buscando vías de financiación y patrocinadores».
«EMPRENDER NO ES UN CAMINO DE ROSAS»
Los restaurantes chinos están subestimados en España. Hasta los que peor fama tienen pueden ser centros de creación. Cuenta Helena Vicente que Ontherecord nació «cenando en un chino malísimo con una amiga. Siempre nos había gustado escribir». La web es un proyecto basado en temas de periodismo, comunicación y algunas cuestiones sociales. Lo que más valoró Helena es que «es un lugar en el que puede escribir lo que me da la gana». «Estamos preparando algunos temas relacionados con la profesión, como los nuevos negros de Internet, y artículos dirigidos a emprendedores». Para conseguir financiación, apuesta por la diversificación: «Hicimos cursos y talleres on line sobre temas de internet; formación para empresas con contenido de posicionamiento en SEO». Y remató antes de terminar: «Emprender no es un camino de rosas, pero hay que aprender a manejarse».
La capital oferta una cantidad inabarcable de actividades relacionadas con el ocio. La web Madrid&Me se propone seleccionar lo mejor de cada rincón madrileño para ofrecérselo a sus lectores: «La idea surgió porque, cada vez que salíamos con los amigos, mirábamos distintas webs. Madrid&Me ofrece cada jueves una agenda con los plantes para el fin de semana», contó Marta Bac, una de las fundadoras. La página nació de la inquietud de Marta y otras dos amigas, todavía estudiantes de periodismo, dispuestas a que la tristeza del panorama laboral no acabase con sus sueños. Su primera y única inversión ha sido comprar el dominio por 15 euros. Ahora esperan abandonar wordpress, crear un diseño propio y diseñar una aplicación móvil «Somos periodistas y no hemos estudiado márketing, pero, hasta el momento, la experiencia ha sido muy buena», afirmó Bac en su despedida.
«Voy a citar a dos personas: Javier Espinosa y Ricardo García Vilanova [reporteros secuestrados en Siria] Información Sensible nació por personas como ellos, con un compromiso por la verdad impagable». Así inició Daniel Montero, periodista en Interview, la presentación de Información Sensible, especializada en reportajes, a la que definió como «mezcla entre una plataforma de periodismo y crowfounding». En ella, los periodistas proponen sus reportajes a los lectores. Si un proyecto no sale adelante, el dinero se le puede devolver a los mecenas o se ofrece la inversión en otro proyecto. El crowfunding, uno de los pilares del sostenimiento de la web, se basa en la financiación de proyectos con dinero de particulares. Un ejemplo de reportaje financiado por crowfounding es el de chicos empeñados en investigar el traslado de la producción de azulejos de Castellón a Rusia. Contó con 500 euros de presupuesto y contó como la deslocalización de los azulejos ha sido devastadora para la zona. Sin embargo, Montero es cauto a la hora de valorar el crowfounding como medio de financiación: «No creo que sea la panacea, puede ser una alternativa en algunos casos, pero no va a salvar al periodismo».
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