El compromiso del reportero: ¿Un deber o una elección?
El periodista no solo plantea preguntas, también se las hace a sí mismo. Y probablemente son estas en las que conseguir una respuesta es más difícil. ¿Puede el periodista tratar sobre temas que afectan a la vida de las personas sin involucrarse? ¿Debe el periodista mantener una distancia con relación a lo que trata?
Estas son las preguntas que la directora de comunicación de la ONG Oxfam Intermón, Lucila Rodríguez Alarcón, ha lanzado a tres eminencias del periodismo: Martín Caparrós, Olga Rodríguez y Jineth Bedoya, durante el debate sobre «El compromiso del reportero» celebrado en el marco del Congreso de Periodismo Digital de Huesca.
«Estas preguntas habría que responderlas con otras. Las que les hago a todos los alumnos universitarios de periodismo: ¿Qué quieren ser ustedes? ¿Quieren ser simples contadores o cambiar el entorno? », espetó la colombiana Jineth Bedoya al público, en su gran mayoría jóvenes estudiantes (mujeres).
Bedoya trabaja actualmente en El Tiempo de Colombia. En el año 2000 estuvo secuestrada durante más de 16 horas aparentemente por paramilitares y uno año después fue secuestrada por las FARC durante ocho días. En sus palabras resuena la historia de una profesional a la que la vida, y el periodismo, la cogieron de las solapas.
«Es difícil no involucrarse, sobre todo, con las realidades que tenemos en América Latina. En Colombia estamos tocados por un conflicto armado de más de 50 años. ¿Cómo no meterme?», se pregunta.
A su juicio, se ha «fallado en la idea de periodismo comprometido. De por sí la profesión debe serlo. Es imposible hablar de una guerra cuando no se siente en la piel». Sin embargo, advierte de que hay que tener cuidado, puesto que al involucrarse, la vida del profesional corre riesgo.
Martín Caparrós, escritor y periodista argentino, a caballo entre la literatura y la no ficción, ha publicado una veintena de libros entre novelas, ensayos y crónicas, y ha dedicado también muchas líneas a diferentes medios de comunicación. Rompedor e innovador como sus textos, Caparrós irrumpió en el debate asegurando que no estaba del todo de acuerdo con Bedoya.
No elegimos involucrarnos, siempre lo estamos
«Estoy en desacuerdo con la idea de involucrarse. Los que no se involucran, en realidad lo están haciendo, ponen en juego lo que piensan sobre el mundo. Y así entramos en la ideología. Y todos tenemos una», zanjó.
«Una de las formas mas estridentes de involucrarse es cuando determinado qué es noticia y qué no lo es», ejemplificó el argentino. «No elegimos involucrarnos, siempre lo estamos. Lo que sí elegimos es hacernos cargos de ese involucramiento. Asumir de qué lado estamos y decidir qué vamos a decir».
Olga Rodríguez, periodista especializada en Oriente Medio, actualmente en eldiario.es condujo el debate hacia la «perversión» con la que se eligen los temas. «En 2011 más de 600 periodistas se acreditaron para cubrir el debate de Rajoy y Rubalcaba. Si esos 600 profesionales estuvieran en una aldea de Cisjordania donde se ocupan ilegalmente territorios o fueran testigos de tantas realidades desconocidas, nuestro mundo seguramente sería otro».
Periodismo intencional
Siguiendo con la línea de Caparrós, aseguró que «el periodista no puede desglosarse, que es ser humano y ciudadano y por lo tanto es inevitable involucrarse». «Decía Kapuscinski que para ser periodista tienes que tener la voluntad de tener empatía, de ponerte en la piel del otro, no para justificar sino para explicar. Hacer un periodismo intencional».
En definitiva, la subjetividad no es una mala palabra, simplemente se trata de tener la capacidad para contar las historias como se merecen, con profundidad y de primera mano. «Comprometerse no es hacerse activista sino contar bien las historias», apuntó Bedoya.
Pero, ¿cómo hacer para que el compromiso no cargue al profesional de sesgo?, volvió a lanzar a la mesa Lucila Rodríguez Alarcón, de Oxfam Intermón
«En los grandes medios se ha creado la idea de la prosa neutra, la diferencia entre opinión y noticia. Y al final, la única que se hace cargo de la subjetividad es la crónica latinoamericana. La gran simulación de los grandes medios es hacer creer que no hay nadie que narra. Y la crónica sí reconoce que alguien que está contando. Siempre hay una persona mirando», concluyó Caparrós.
La ONG Oxfam Intermón ha celebrado el encuentro sobre el Periodismo como herramienta de denuncia universal los días 10 y 11 de marzo. Durante el encuentro, se han alcanzado una serie de conclusiones y el debate se ha trasladado al XV Congreso de Periodismo Digital de Huesca. «Oxfam Intermón pretende cambiar la realidad y luchar contra las injusticias. Y los periodistas de calidad son indispensables en esto», concluyó Lucila Rodríguez Alarcón