Poesía

Cuando un tuit se convierte en poesía

libro poesia portada

Guillermo Spottorno, director y creador del portal cultural «Soypoeta.com», decidió, en 2001, juntar sus dos pasiones: la informática y la lírica. Al principio, utilizaba la página como un espacio para practicar y experimentar, «para ver cómo era eso de llevar una página web». Según comenta el propio Spottorno, la finalidad del portal es «fomentar escritura y poesía, así como servir de puente entre España e Hispanoamérica». Dos objetivos que a su parecer ya se han cumplido.

Durante diez años fue un medio de comunicación en el que los poetas colgaban sus piezas y las compartían con el público. Sin embargo, en 2011 se produjo el cambio que transformó este portal en algo diferente. Una renovación que hizo que se convirtiese también en una red social de poesía, la primera y, por ahora, la única en castellano. En la página se ofrecen noticias relacionadas con el mundo poético y se facilita una agenda en la que figuran convocatorias y concursos que puedan interesar a los poetas. A esto se añaden sus funciones como red. Cuenta Spottorno que «cualquiera puede darse de alta y compartir sus poemas, hacer amigos como en cualquier otra red social». Solo que aquí, además, se comparte la pasión por la poesía. Es una red libre a la que cada uno sube lo que le apetece. «No hay que tener miedo ni vergüenza. Los poemas que muchos académicos menospreciarían tienen éxito y, a lo mejor, una pieza hermética escrita por alguien muy experimentado no llama la atención de nadie», asegura el creador del portal cultural.

Cabecera del portal «Soypoeta.com»
Cabecera del portal «Soypoeta.com»

También se pueden crear grupos. Los hay de carácter temático, como el de poesía social, al que los usuarios envían poemas relacionados con la crisis. «Vi la propuesta, me interesó, hablé con el que dirige el grupo –Ángel Rodríguez– e incentivé el proyecto», narra el director de «Soypoeta.com». De la unión nació un libro: «Poemas al director. 68 miradas críticas en tiempos de crisis». Spottorno pidió colaboración y consiguió la participación de autores como: Luis Eduardo Aute, Inma Luna o Juan Carlos Maestre, entre otros. En diciembre de 2013, se hizo la presentación de la obra en el Ateneo. Una experiencia que atesora en la memoria y que califica de «maravillosa». Los beneficios fueron para Raíz Fundación, una asociación que ayuda a la gente que vive en la calle. De esta forma, se plasmó la tendencia que sigue la literatura actual: ahora, las letras pasan de internet al papel, cuando antes era al contrario.

Algunos casos de éxito

Este paso de la Red al libro impreso ya lo han dado muchos autores, la mayoría de ellos jóvenes cuya afición a la poesía les hizo compartir su obra a través de internet. Es el caso de artistas como Escandar Algeet, que se dio a conocer a través de Youtube;  Loreto Sesma, que cuenta con 12,4K de seguidores en Twitter; o la archiconocida Elvira Sastre. Pero la lista no termina aquí. Autores como Nacho Montoto, con varias obras a sus espaldas, o María Melcromina, con millones de seguidores, también son muy conocidos en el ámbito de la poesía. Ambos participaron en «Anónimos», los talleres express que la empresa de promoción cultural «El Dispensario» hace en el festival cordobés de Cosmopoética desde 2007. En ellos, los poetas noveles entregaban en papel sus obras a otros más experimentados. Los autores de trayectoria reconocida corregían los textos y daban consejos. Se seleccionaban los mejores.

Cabecera de la página web «Anónimos»
Cabecera de la página web «Anónimos»

Sin embargo, en 2011 hubo un punto de inflexión. Rafael Jurado, director creativo de «El Dispensario», relata que se dieron cuenta de que «la literatura en general y, sobre todo, la poesía estaban floreciendo en la Red, en páginas como Facebook; estaban en plena efervescencia». Se decidió seguir con el mismo proyecto, pero esta vez usando las redes: los poemas se reciben por correo electrónico, Facebook o Twitter. A pesar de que no se trata de un concurso, hay un comité de selección por el que han pasado poetas de la talla de Maestre o Rosetti. Ellos son los encargados de elegir los que se van a publicar. No hay recompensa material. Es un escaparate en el que los autores logran hacerse visibles.

Además, en el último año, «Anónimos» ha abierto una página en Instagram dedicada a poesía visual, en la que fotografías con carga lírica van acompañadas de un poema. «La página ha funcionado bien y puede que lo mantengamos», dice Jurado. Las temáticas de los poemas que se presentan al taller son libres y abiertas. La extensión también. El único requisito es que los participantes no tengan una carrera en el mundo de la poesía o que, si la tienen, sea muy incipiente.

Jurado afirma que mucha de la poesía que llega al taller tiene un marcado carácter social, fruto de la crisis económica. En este punto, el director creativo coincide con Spottorno, quien asegura que a los temas sociales se suma el amor: «No importa el tema que se proponga para el concurso que hacemos cada 3 meses en Soypoeta.com, siempre acabamos recibiendo poemas de amor».

Una evolución constante

Los formatos de hoy también son muy variados, algo en lo que internet ha tenido mucho que ver. Jurado se muestra convencido de que «los formatos clásicos, los ya establecidos, siguen ahí pero internet ha hecho que cambien y que aparezcan otros nuevos». Para él, con internet ha surgido una poesía más cercana, con una visión más amplia, que da lugar a géneros híbridos como la prosa poética.

No obstante, Pilar González España, directora de la Casa de la Poesía, cree que aún es pronto para saber si la lírica ha cambiado con la influencia de internet, pero reconoce que «parece que algo se mueve, que muchas veces la palabra se funde con lo visual». González coordina las actividades que su asociación realiza cada miércoles en el Teatro de la Puerta Estrecha y en las que es común que la poesía se mezcle con otras disciplinas como la música o la danza. Para ella, la fuerte relación que existe entre internet y la lírica ha traído desventajas «como la lectura más rápida y superficial, menos profunda». Algo a lo que Spottorno añade la pérdida de la figura del poeta bohemio que se inspiraba en clásicos como el mar, la mujer, el hombre. «Pero es que también hay que cambiar y evolucionar», comenta este apasionado de los versos.

teatro puerta estrecha
Fachada del Teatro de la Puerta Estrecha, donde la Casa de la Poesía celebra recitales cada miércoles

Aunque si algo queda claro es que la Red ha logrado que la poesía se democratice. Según Jurado, «la poesía ha dejado de ser una cuestión académica o decimonónica». El director creativo de «El Dispensario» confiesa su predilección por Twitter, «donde se pueden colocar frases, aforismos, versos…». Unas declaraciones que coinciden con las de Spottorno, que ve interesante el acercamiento de la poesía a millones de personas: «Todos somos poetas. Lo que hay que hacer es mirar la vida con el corazón, la estética de las cosas, ser sincero. Todos somos bienvenidos al mundo de la poesía».

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