Te doy libertad
Escribe. ¿El qué?. Lo que quieras. Pasan los minutos y te pones nerviosa al escuchar el sonido de las teclas del ordenador. Todos tus compañeros están escribiendo menos tú. ¿Por qué? Por una vez, bueno ya son tres porque es la tercera vez que coincides con el profesor, que te dan libertad total para que redactes lo que quieras, vas tú y te bloqueas. ¿A qué se debe? ¿Es producto de este mundo o se trata de un problema personal? Cuántas veces habremos soñado con tener la capacidad y conocimientos suficientes para poder plasmar tu opinión en un medio de comunicación, sin que nadie te mande, ni te ordene, ni te corrija… Y ahora tú desaprovechas la oportunidad. Y vuelvo a repetir, ¿por qué?. Por cómo nos ha acostumbrado la sociedad. De pequeños aprendemos a que nos digan todas las cosas. Primero los padres y profesores y luego los medios de comunicación. La televisión nos lo da todo mascado, no nos deja pensar. Salvo programas o personajes contados. Por eso la mayoría de nosotros consume más televisión y menos periódicos, libros, radio, etc. Nos gusta lo fácil, lo cómodo. Nos solemos conformar con muchas cosas. Y eso tiene que cambiar. Va a empezar a cambiar. Y espero que ese giro sea fruto de las nuevas generaciones como nosotros. Ahora tenemos el papel de re-educar a la sociedad. Y lo más importante es hacerlo bien.