La guerra de los cereales llega a Madrid
El nuevo plato estrella de algunas cafeterías de Madrid no es tan innovador como parece. Lleva en las cocinas españolas desde los 80. Los cereales están de moda y algunos negocios han aprovechado la oportunidad para ofertarlos con diferentes formas, colores y sabores que proceden de todas partes del mundo. La demanda ha ido aumentando desde que abrió el primer negocio de la ciudad, en el mes de abril. De hecho, ya existen locales en Lavapiés, Malasaña y Alcorcón.
Estos primeros establecimientos que han aterrizado en la ciudad han cogido tanta fama que sus clientes pueden llegar a esperar hasta 30 minutos, formándose una cola que puede dar la vuelta al local. No importa la edad, pues desde niños hasta personas mayores acuden a estos lugares para desayunar, comer, merendar o cenar. Los preferidos son los Lucky Charms y los Froot Loops. Estos últimos, que hace unos años dejaron de comercializarse en España por exceso de azúcar, son famosos por su aparición frecuente en series y películas norteamericanas.
Cereals Lovers
El pasado 9 de abril, en el Mercado madrileño de Antón Martín abrió Lovers Cereals, «un bar coctelería de mezcla de cereales con bebidas combinadas», detalla Iván Ruiz. Él, Óscar Vela y Jonás Jiménez son los responsables de este local y los tres llevaban planteándose la idea desde hacía varios años. «Queríamos acercar un producto del que había carencia de variedad en España», dice Ruiz.
La investigación de mercados les llevó a indagar en el ámbito internacional para innovar en el sector español. Por este motivo se centraron especialmente en el recipiente de los cereales, descantándose por bols fabricados con material biodegradable para evitar la “contaminación cruzada» en casa de intolerancias.
«La diferencia de este cuenco respecto al de cristal es que los lavavajillas desinfectan pero no esterilizan, por lo que si tienes mucha intolerancia, por ejemplo al gluten, y vienes todos los días a comer cereales, saldrías con indigestión porque inevitablemente quedarían restos de las botellas, las cucharas…», explica.
En la carta de Cereals Lovers se pueden encontrar más de 200 cereales. De ellos, más de 175 proceden de diferentes partes del mundo como Australia o Estados Unidos. El dueño del establecimiento señala que el producto más peculiar que tienen es Oreo O’s del Sur de Corea.
Asimismo, hay más de 60 tipos de topping -ingredientes dulces- y galletas que también son importados de varios países como Japón. En cuanto a la bebida, el consumidor puede elegir entre más de 30 tipos de leche animal y vegetal.
La última apuesta de Cereals Lovers es el reparto a domicilio sin ningún coste. «Hay días que la gente no le apetece salir a la calle porque hace frío o llueve y al igual que pedimos comida china o pizza, ahora también se pueden solicitar cereales», explica. Una buena opción para poder disfrutar de sus productos los domingos, los únicos días que cierran. Además, así se evitan las colas que se forman cada fin de semana a pesar de que el local cuenta con un aforo de 80 personas.
Otras de las características de Cereals Lovers es su localización. «Queríamos impresionar a nuestros clientes al ver en 14 m² más de 200 tipos de cereales y a la vez con esta localización apoyamos al mercado tradicional», dice Ruiz.
Cereal Hunters
El 21 de mayo se unió a esta nueva moda Cereal Hunters, situado entre Chamberí y Malasaña. «Queríamos que nuestro local estuviese por la zona de Malasaña porque la gente esta más abierta a nuevas ideas de negocio», dice Cristina López, una de las socias.
Son cuatro las personas encargadas de Cereal Hunters: Marcos Villaplana, Jaime Salvat, José Javier y Cristina López, que dejó sus estudios de Publicidad para embarcarse en esta nueva aventura.
La cafetería está decorada con una gran colección de cajas de cereales de los años 80-90 que sus dueños han ido adquiriendo poco a poco por Internet y gracias a la ayuda de amigos. Asimismo, tienen tanto objetos como fotogramas de películas y series para recrear el ambiente al estilo cotidiano estadounidense.
Cada fin de semana visitan Cereal Hunters unas 600 personas que deben hacer hasta 30 minutos de cola para probar sus productos. Además de 160 tipos de cereales, 154 importados, tienen Pop Tarts – unas galletas rellenas de dulce-.
Para acompañar a los cereales, se puede escoger entre veinte bebidas. Sin embargo, López recomienda la leche fresca porque «la traen todas las mañana de una ganadería de la sierra». Del mismo modo, se le puede añadir colorantes de diferentes tonalidades para cambiar el color de la leche y hacerla más divertida y fomentar que se comparta en las redes». Finalmente, para complementar la merienda poseen 14 topping, entre los que destacan los Reese’s, unas pequeñas perlitas de crema de cacahuetes.
El negocio ha tenido tanto éxito que están planteándose abrir un nuevo local en la Calle Alcalá y próximamente comenzarán a tener servicio a domicilio. Además, barajan la posibilidad de que sus clientes puedan adquirir las cajas enteras de cereales.
«Estamos muy contentos, viene gente de todas partes a ver qué es esto. La semana pasada llegaron unos estudiantes de Canarias que estaban haciendo su viaje de fin de curso y pidieron a sus profesores acercarse», sentencia. «Gracias a las redes sociales y a youtubers e instagramers que pasan por aquí, como Chicfy, nos ayudan a darlo a conocer».
Cereal House Café
El último en abrir sus puertas ha sido Cereal House Café, que se instaló en Alcorcón el pasado 21 de diciembre. «No había nada parecido en la zona sur de Madrid y decidimos intervenir en ella» aclara Sergio Sáez, uno de los socios.
Sin embargo, comenta que el nombre del local refleja la idea con la que querían que se identificara el negocio. «Somos más bien una cafetería en la que puedes venir a tomar productos elaborados con cereales, desde bizcochos y mueslis hasta tostadas y helados», señala.
El local, que ha tenido una «gran acogida», tiene capacidad para 50 personas. No obstante, Sáez afirma que «aquí no tenemos colas» y que por eso mucha gente de diferentes partes de Madrid viene aquí. Asimismo, los vecinos del barrio suelen comprar las raciones para llevar y tomarlos al día siguiente en el desayuno.
En Cereal House Café, los clientes pueden encontrar 100 tipos de cereales importados, unos 9 topping y más de 12 bebidas vegetales y animales.
«Los cereales están en auge», así lo admite Cristina López, miembro del equipo de Cereal Hunters, quien comenta que escucha en la cola a gente planteándose abrir más negocios como estos. De hecho, en la calle Alcalde Sainz Baranda con esquina Antonio Arias ya están anunciando la apertura de otro.
Una de las razones del éxito de estas cafeterías puede estar relacionada con que el consumo de cereales ha crecido notablemente entre los adultos, según la Asociación Española de Fabricante de Cereales. De modo que esta nueva tendencia de consumo, unido al poder de las redes sociales, puede que ayuden a situar a España en la media europea de ingesta anual de cereales que actualmente se sitúa en 2,17 kilos por persona.
Mientras tanto, estos locales seguirán disputándose a los clientes pensando nuevas estrategias para captarlos y diferenciarse de la competencia.
Conforme voy cumpliendo años, ya he llegado a los 61, me quedo más confundido y extrañado con los cambios tan bruscos y rápidos en nuestras costumbres; en el caso del presente artículo es un ejemplo claro de dichos cambios en las costumbres nutriccionales, cambiamos el café de turno o el chocolate, por distintos tipos de cereales y distintos tipos de bebidas de leche animal y vegetal. Como padre veía los desayunos con cereales de mi hija como algo extraño y ahora resulta que hay colas para entrar en esos nuevos establecimientos precisamente para degustar distintas tipologías de cereales.
El artículo me ha abierto la curiosidad e iré con la familia a probar dichas meriendas, claro está no estoy dispuesto a ponerme en una cola, iré un día o a una hora donde no existan las mismas.
Es una forma entrañable de pasar el día, además si es rodeado de esos productos americanos que tanto has visto en tus series favoritas. Muchas gracias por darnos de desayunar con tanta variedad. ¡Un saludo!
Desde luego me encantan estos establecimientos en Madrid. Los conozco desde hace unos meses y nos encanta ir loos fines de semana a comernos unos buenos cereales importados. Un abrazo!!