Moncloa blinda sus fiestas populares contra la agresión sexual
La madrugada del 14 de octubre de 2017 dos adolescentes fueron víctimas de abusos sexuales en las fiestas del Pilar. Ambos casos se dieron por separado. Las agresiones se produjeron cuando las mujeres estaban solas. Las vejaciones fueron similares y las jóvenes, una de ellas menor de edad, formalizaron la denuncia en la Comisaría.
La Junta Municipal de Moncloa-Aravaca aprueba un proyecto para institucionalizar la colocación de Puntos Violeta en los eventos multitudinarios del distrito. Los equipos de información estarán conformados por personas voluntarias, formadas previamente para atender casos de agresión sexual. Según la vocal del Partido Socialista, María Ángeles García Parreño, los denominados Puntos Violeta son casetas en espacios abiertos que trabajan para concienciar, denunciar y erradicar una problemática social «que asesina, maltrata, intimida y violenta a las mujeres». La propuesta inicial fue elaborada por Ahora Madrid y PSOE, pero se concretó por unanimidad con el apoyo de los Populares y de Ciudadanos.
El eje central del proyecto político es ofrecer a las mujeres un punto claramente visible en un espacio público para informarse sobre la violencia machista o denunciar cualquier tipo de acoso. Según el Área de Gobierno de Políticas de Género y Diversidad del Ayuntamiento de Madrid, las casetas serán fácilmente identificables mediante cartelería de campaña y estarán ubicadas en sitios estratégicos durante las fiestas más importantes de Moncloa a partir de 2018.
La directora general de Prevención y Atención frente a la Violencia de Género, María Naredo, destaca lo hecho hasta el momento por los distintos movimientos feministas autónomos y resalta también el trabajo desarrollado por agrupaciones contra la violencia machista. Asimismo, celebra el apoyo institucional que lleva adelante la Junta Municipal de Moncloa.
Lo que comenzó de manera incipiente durante las fiestas populares del verano pasado en algunos distritos, se consolida y cobra mayor trascendencia hacia el futuro. «A partir de ahora los Puntos Violeta dejan de ser una iniciativa particular y pasan a ser una cuestión que compele al Ayuntamiento. Esto quiere decir que en la organización de los próximos eventos los pliegos incluirán los puestos, tanto de manera jurídica como a nivel presupuestario», explica Naredo.
Por su parte, María Ángeles García Parreño, impulsora del proyecto, indica que la lucha por la erradicación de la violencia de género va incorporando puntos en función de la evolución y concienciación de la propia sociedad, y en la medida en que se realizan las denuncias. «Los casos de agresión por violencia sexual sufridos por las dos jóvenes en las fiestas del barrio del Pilar el último octubre fueron determinantes a la hora de presentar la iniciativa Puntos Violeta en Moncloa-Aravaca», señala García Parreño.
De la misma manera, la representante socialista subrayó la importancia de institucionalizar un proyecto que atiende a la mujer en estado de inseguridad, de miedo y de abandono; a una mujer que ha sido víctima, objeto de acoso, violencia o agresión sexual en cualquiera de sus formas. «Un Punto Violeta cumple una doble función: por un lado, es un sitio amigable donde poder denunciar, ser atendida, escuchada, asesorada y protegida; y por otro, es un faro visible para inhibir a los agresores, para que no se crean impunes», apunta la vocal.
En sintonía, Paloma Cruz, vocal de Ahora Madrid de la Junta Municipal de Moncloa, relata que las casetas sirven para visualizar el compromiso social contra la violencia machista y para interpelar a la sociedad para que se implique. «La legitimación institucional de los Puntos Violetas es para reforzar el compromiso municipal contra la violencia machista», afirma Cruz. Y añade que los puestos cuentan con gente idónea para informar, prevenir y actuar sobre cualquier tipo de agresión en los espacios público.
Primeros pasos
Los Puntos Violeta en Madrid cobraron visibilidad durante la última temporada estival en las fiestas populares del distrito Centro. La campaña denominada Fiestas libres de violencias machistas, destinada a jóvenes y adolescentes, tuvo como objetivo «informar, sensibilizar y formar para prevenir y atender las agresiones sexuales durante las fiestas de verano».
Además, desde el Área de Políticas de Género y Diversidad aseguran que se está trabajando para conseguir que las fiestas, la noche, las calles, sean espacios libres y seguros para todas las mujeres. Lo importante es concienciar a la gente que acude a las fiestas populares sobre la necesidad de asumir el compromiso en contra de las agresiones sexuales machistas.
La directora general de Prevención y Atención frente a la Violencia de Género, María Naredo, expresa que la campaña de verano fue un éxito en formación, sensibilización y concienciación sobre la problemática. Consultada sobre el compromiso de la Junta Municipal de Moncloa-Aravaca, la funcionaria declara que la iniciativa institucionaliza los Puntos Violeta como presencia física de protección en las fiestas y redunda en una sensación de seguridad mucho mayor.
Formación de voluntarios
En cuanto a la formación de las personas que participan en los Puntos Violeta, se están desarrollando cursos para voluntarios y voluntarias que estarán presentes en las fiestas
Según comenta la directora de la Fundación para la Convivencia ASPACIA, Virginia Gil Portolés, la formación que se les brinda a los voluntarios «pretende proporcionar un marco básico y común para identificar qué es la violencia sexual (definición, tipos de violencia sexual, datos), y pautas para la atención en las casetas». Y agregó: «Nuestra Fundación impartió las capacitaciones en el marco de un contrato de servicios con el Ayuntamiento. Está dirigida a todas las personas voluntarias participantes en los Puntos Violeta, para sensibilizar a la población sobre el tema de la violencia sexual».