El coronavirus amenaza al sector hostelero
Todo el sector de la hostelería se está resintiendo, la bajada de clientes se debe principalmente a la disminución del turismo. El temor, el miedo al contagio y las duras restricciones impuestas por el Congreso Territorial del Sistema Nacional de Salud han provocado, desgraciadamente, el cierre de muchos bares, restaurantes, comercios y hoteles, como por ejemplo el cierre temporal del Museo del Jamón o el histórico Mercado de San Miguel.
La afluencia de gente se ha reducido tanto que Madrid se ve triste sin sus turistas, sin su ambiente, sin su esencia. Lugares tan famosos como la Plaza Mayor, la Puerta del Sol, la Plaza de Isabel II, la Calle Arenal, entre otras, ofrecen una imagen desoladora. Las avenidas semivacías y la falta de trasiego de la gente, han provocado el cierre de muchos locales… siendo así muchos los negocios que no volverán a levantar sus persianas.
Aunque muchos otros siguen abiertos ¿creéis que podrán aguantar muchos meses más en esta situación?
Se recogen a continuación tres testimonios sobre la tragedia de la pandemia, que está generando una gran crisis económica y hostelera que, lejos de remitir, está en su momento más crítico.
Casa Ciriaco, una de las tabernas más emblemáticas y centenarias de la capital, ubicada en la calle Mayor, es un gran ejemplo de restaurante que pese a las consecuencias de la pandemia sus puertas siguen abiertas. A pesar de que facturan un 70% menos que el año pasado. «Es ridículo, estamos haciendo un esfuerzo para mantener que Casa Ciriaco continúe», explica el gerente. «Nos sentimos abandonados. Existen guerras entre el gobierno central y el autonómico, este primero se quiere hacer con el centro de Madrid a toda costa y estas son las consecuencias que estamos sufriendo todos los ciudadanos» «Tienen que dejar de luchar políticamente y luchar por el pueblo, dejar a un lado las guerras personales y las guerras políticas», protesta.
El dueño del clásico Mesón de La Tortilla, local típico situado en la Calle Cava de San Miguel, declara desesperado: «Desastre absoluto. Lo peor está por llegar».
Otro de los testimonios recopilados ha sido el de Javier Nieto, hijo del propietario del emblemático mesón del Rincón de la Cava, del Restaurante La Entrada, la Finca Los Jarales y del Mirador del Arcos de Cuchillero. «Nuestra empresa es familiar, mi padre la inició cuando tenía 14 años, ya tiene más de 70. En todos sus años de negocio ha vivido varias crisis y sin duda esta es la peor. Esta crisis es diferente, porque no es que haya falta de trabajo, directamente no nos dejan trabajar y ahí entra la gestión de los gobiernos», protesta.«Es de locos, teníamos al 80% de la plantilla reincorporada pero nos vemos obligados a reducir, probablemente al 20-40%».
A día de hoy y pese a que están sufriendo las fuertes consecuencias de la pandemia, siguen abiertos y trabajando para dar momentos de felicidad a sus clientes. Sin lugar a dudas el covid se cobra otra víctima, el sector hostelero. La gran crisis que ha provocado el coronavirus, amenaza principalmente a la hostelería, por ello mientras dure la pandemia, los hosteleros deberán desenvolverse en «el día a día» para poder seguir sobreviviendo.
«Pero Madrid se recuperara, volverá a brillar. Volverá a ser nuestra gran ciudad», comenta conmovido, un vecino del Centro.