¿Hacia dónde se dirige el Periodismo?
Ramón Salaverría (periodista, dirige el Departamento de Proyectos Periodísticos en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra y preside la Sección de Estudios Periodísticos de la European Communication Research and Education Association) y José Luis Orihuela (profesor en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra y autor de 80 claves sobre el futuro del periodismo) comparten con Madrilánea la revolución digital que vive hoy el mundo de la comunicación. Lo que para muchos es el futuro, para ellos es el presente más inmediato. Sus palabras, llenas de experiencia y de oficio, demuestran que la pervivencia del Periodismo —más allá de sus soportes— es incuestionable. Las formas cambian; la comunicación sigue adelante.
Según las tendencias actuales, el periódico en papel decae en favor del ciberperiodismo, aunque la crisis de publicidad afecta de igual manera a ambos soportes. De todas formas, la publicidad no acaba de volcarse en internet. Con este panorama, ¿cómo contempla el futuro del periodismo? ¿Quizás el papel deberá alejarse de la inmediatez para ofrecer un contenido distinto? ¿Va a morir el papel?
Ramón Salaverría Esa no me parece la pregunta. Lo que debe preocupar a las empresas periodísticas y especialmente a los periodistas es si el Periodismo como tal va a sobrevivir. Y desde ese punto de vista yo soy absolutamente optimista. Me parece que nunca como ahora se está consumiendo tanta información, y la información es relevante a la hora de tomar decisiones en sociedad. Y por tanto, si el Periodismo cumple ahora una función que es demandada por una cantidad enorme de personas en las sociedades occidentales, no me cabe duda de que se buscará la fórmula para que esta profesión perviva, porque podemos entenderla como una demanda social. El problema está en que las estructuras industriales que vienen utilizando las empresas periodísticas se están viniendo abajo, literalmente, desde hace unos cuantos años. Da la sensación de que las empresas están más pendientes de guardar la ropa que de nadar, cuando existe muchísimo mar por delante. Ha habido un planteamiento bastante defensivo por parte de las empresas periodísticas en los últimos veinte años, que es el tiempo en el que se ha producido este impacto de las tecnologías digitales en el Periodismo, y han estado menospreciando el impacto de lo que se venía. Y ahora estas empresas periodísticas han llegado a la conclusión de que este territorio ha llegado para quedarse, que tiene unas reglas específicas, y que hay que ser lo suficiente creativo para ser rentable. Los periódicos impresos en Occidente no sé si están llamados a desaparecer, pero sí están llamados a perder su hegemonía editorial y publicitaria que han tenido durante el siglo XX. Ya no van a ser el medio de referencia, con toda seguridad. Probablemente seguiremos viendo durante muchos años periódicos de papel, pero ya no se va a hablar de lo que publique un periódico a cuatro o cinco columnas.
José Luis Orihuela Hay que distinguir entre el futuro de los actuales modelos de negocio, tanto de los soportes físicos como digitales, del futuro de la profesión y la función social del periodismo. Cuanta más información haya disponible, más necesaria se hace la función intermediadora del periodismo. Frente a la dispersión de fuentes, voces y canales, más importante resulta el funcionamiento de las redacciones como inteligencias colectivas. El periodismo tiene futuro, no necesariamente los viejos medios ni la publicidad tradicional. Tal vez lo que ahora llamamos prensa escrita o impresa tengamos que comenzar a llamarlo sencillamente Prensa o a lo sumo prensa leída, ya que los soportes de la información tienden a ser digitales.
¿Pero entonces tiene sentido que existan periódicos en el futuro? ¿Qué aspectos tendrían que cambiar las actuales redacciones?
Ramón Salaverría Los medios tradicionales con su estructura de rotativas de distribución de papel costosísima no resultan rentables. Las empresas periodísticas buscarán fórmulas para proveer a la sociedad de información. Durante los últimos 15 años hemos vivido una etapa de impacto digital orientada a la información web; pero en esta segunda década del siglo estamos orientados a una etapa orientada a los dispositivos móviles con distintos tipos de acceso a la información, a veces con acceso libre y a veces con acceso digital más restringido. Este tipo de modalidades están ofreciendo oportunidades novedosas para los medios. Es el caso del New York Times, un medio al que, hoy por hoy, le lastra su edición de papel. Las empresas tendrán que hacer un esfuerzo por acomodarse a unos modelos de organización más modestos, ágiles, versátiles y descentralizados. Pero lo que no está en cuestión es el futuro del Periodismo. El papel tiene una serie de cualidades que lo hacen versátil en ámbitos rurales, con un formato absolutamente conveniente. No todo el mundo tiene la conectividad que hay en la Gran Vía de Madrid. El periódico llega a donde la información digital no llega. También ocurre a la inversa. El periódico tradicional no va a desaparecer en un futuro inmediato ni a un medio futuro. De lo que no tengo ninguna duda es que va a perder la hegemonía. Y en las empresas periodísticas el que manda es el que da el dinero. Y si el periódico se convierte en un lastre, se buscarán fórmulas para reorientar el equilibrio de poderes. Y aquí los medios digitales tienen las de crecer, no sé si las de ganar.
José Luis Orihuela La Prensa será cada vez más una cabecera de prestigio que proyecta su autoridad sobre la información que produce y distribuye de manera transmedia, y cada vez menos un edificio con unas rotativas alemanas y bobinas de papel almacenadas. Paulatinamente vamos aceptando que el papel es un soporte ineficaz, caro e insostenible para la distribución de información. Tras 244 años de historia la Encyclopaedia Britannica acaba de anunciar que dejará de imprimir su clásica edición en 32 volúmenes. Ya va siendo hora de que asumamos lo inevitable en el sector de los medios. Hay mucha dispersión de esfuerzos en todos los medios tradicionales, que a pesar de la era digital siguen intentando cubrirlo todo con redacciones escasas y devaluadas. Hay que apostar por la especialización y la excelencia. En segundo lugar, hay que acometer el cambio cultural y generacional en las redacciones y en las direcciones: no es posible obtener resultados distintos si seguimos haciendo las cosas como siempre. Finalmente, hay que explorar con mayor decisión el terreno de las sinergias y alianzas estratégicas con empresas tradicionalmente tecnológicas pero no especializadas en la gestión de contenidos.
¿Para qué sirve un Congreso de Periodismo Digital? ¿Cree que luego se toman medidas prácticas al respecto?
Ramón Salaverría Los congresos no suelen tener un efecto inmediato. Pero sirven para difundir el conocimiento, para que la gente que está involucrada de una u otra manera, desde profesionales, académicos, jóvenes estudiantes, tengan conocimiento de las cosas relavantes que se están haciendo. También los congresos son foros de debate y son oportunidades para que la gente contacte. Se suele decir que en muchos congresos son más interesantes los pasillos que la propia platea.
José Luis Orihuela El «periodismo digital» hace 15 años era una novedad, pero hoy es sencillamente «Periodismo», ya que no hay otro modo de concebirlo. Los encuentros de comunicadores articulados en torno a la tecnología no suelen conformar ni a los periodistas ni a los tecnólogos: para unos el pasado sigue vigente y para otros el futuro todavía no ha llegado. El evento de Huesca tiene el indudable mérito de su antigüedad y persistencia, y sirve para que los aspirantes conozcan a los consagrados.
Frases para pensar
Ramón Salaverría«Las empresas están más pendientes de guardar la ropa que de nadar, cuando existe muchísimo mar por delante»
«Los periódicos impresos en Occidente no sé si están llamados a desaparecer, pero sí están llamados a perder su hegemonía editorial y publicitaria que han tenido durante el siglo XX»
«Lo que no está en cuestión es el futuro del Periodismo»
«El periódico llega a donde la información digital no llega»
José Luis Orihuela
«El periodismo tiene futuro, no necesariamente los viejos medios ni la publicidad tradicional»
«Tal vez lo que ahora llamamos prensa escrita o impresa tengamos que comenzar a llamarlo sencillamente Prensa»
«El papel es un soporte ineficaz, caro e insostenible para la distribución de información. Ya va siendo hora de que asumamos lo inevitable en el sector de los medios»
«Hay que acometer el cambio cultural y generacional en las redacciones y en las direcciones: no es posible obtener resultados distintos si seguimos haciendo las cosas como siempre»
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Me parece una reflexión intelectual de gran altura y alcance. Qué duda cabe que están cambiando los hábitos de «consumir» información y lógicamente, de ofrecerla, gracias a las ingentes posibilidades del ciberperiodismo. Pero, ¿cómo se crean, se cultivan, se fortalecen las empresas y los empresarios periodísticos o informativos? El gran problema ahora es la escasez de vocaciones de editores, no me refiero claro a los editores personales o autónomos, sino a las empresas sean pequeñas, medianas o grandes. Os felicito. Un abrazo, Jesús Tanco.