La Puerta del Sol se baña en «Vinotinto»
Un grupo de veinticinco venezolanos repartidos en distintos países del mundo se mantienen unidos por el mismo sentimiento: la danza. Team Vinotinto, un conjunto de baile callejero, congrega a cientos de personas a su alrededor en cada show de «breakdance» que preparan en la Puerta de Sol.
Un chico permanece firme con la cabeza apoyada en el suelo. Con la ayuda de sus manos, otro compañero se encuentra haciendo piruetas. Los otros tres animan al público con palmas para conseguir una recompensa de sus bolsillos. Un estilo propio del «breakdance» que no se identifica con el Parkour. «Este estilo viene de la época de James Brown», afirma Andry Ocando, un miembro del grupo.
Aunque la mayoría de sus integrantes permanecen en Venezuela, nueve de ellos decidieron viajar a Europa: cuatro se encuentran en Francia y otros cinco en España. Este quinteto, que ensaya en la estación de metro de Sol, representa a nuestro país a nivel internacional en diferentes campeonatos. El primero de este año se celebrará el sábado 20 de enero en Nantes, una pequeña provincia de Francia.
Daniel Gómez, cuyo nombre artístico es B-boy MiniJoe, anticipa que aparecerán en la próxima edición del concurso Got Talent, que empezará a emitirse el miércoles, 17 de enero. El bailarín ha revelado que se encuentran en la semifinal del programa y que dependen de las votaciones del público para continuar en la siguiente fase.
Su trayectoria está marcada por los triunfos en campeonatos mundiales. B-boy MiniJoe habla sobre su participación en la Battle of the year, y resalta que es una de las competiciones más importantes de «breakdance» que se celebra en Alemania. En esta batalla quedaron en sexta posición entre un total de 36 países participantes.
Los vídeos grabados por ellos mismos son su carta de presentación. Aprovechan el escaparate de sus diferentes redes sociales para difundir sus performances. Después las muestran a los comités de organización y a los patrocinadores y es ese grupo de personas el que decide si les otorgan una plaza o no en la competición. «En todo caso, ellos nos invitarían con todos los gastos pagados», afirma Ocando.
El grupo de baile lamenta que en España no haya más competiciones del estilo. Mientras que en Francia hay una asociación que subvenciona el evento de manera casi mensual. «Aquí apenas invierten en este tipo de actividades», según manifiesta Ocando. «Nosotros asistimos a festivales, a musicales…a todo sitio donde nos podamos colar», añade el breaker.
El metro como sala de ensayo
Las estaciones de metro siempre han sido una de las zonas clave para ensayar. «Nuevos Ministerios era uno de los sitios donde más se entrenaba. Pero hace poco abrieron un gimnasio dentro de la estación y ahora hay mucha policía allí. Este ambiente no gusta a ninguna de las partes», afirma Andry Ocando. «No entiendo por qué incomodan, tampoco estoy seguro si es esa la palabra…a mí me parecen majos», expresa uno de los hombres del personal de mantenimiento.
Este encargado de la limpieza, de hecho, sugiere que la estación no es lo mismo cuando ellos no están. «Todo es rutinario, gente con prisa…ellos dan otro toque», asegura este madrileño. Aunque cada vez son menos las ocasiones en las que se pueden ver por allí a los bailarines, muchos jóvenes que se sienten atraídos por estas exhibiciones siguen merodeando por la zona.
«A mí me gusta venir por esta zona a ver si me los encuentro. Estuve en una escuela de breakdance y aunque tuve que dejarlo, me sigue encantando», cuenta Jonathan, un madrileño de 17 años que se dedicó a la danza profesional. Este joven afirma que también se les puede encontrar en otras partes de Madrid como el Retiro, Callao o San Sebastián de los Reyes. Sin embargo, lo normal es que cada bailarín acuda siempre al mismo grupo.
La pérdida de Azca como zona de ensayo ha motivado esta expansión. «Antes en Nuevos Ministerios se unían todo tipo de géneros de baile: breakdance, hip-hop, walking… Ahora los grupos se han dispersado y están más consolidados», explica Ocando.
Desde que surgió este auge de bailarines repartidos por diferentes paradas de metro, la Comunidad de Madrid ha acondicionado diferentes zonas de ensayo en las estaciones de Cuzco y Usera. Estos espacios están destinados al trabajo del teatro, la danza y la música.
Tras 25 años con las puertas abiertas, estas instalaciones, que se inauguraron en 1992, se cerraron el pasado 18 de febrero. De hecho, el espacio de Cuzco cuenta con tres salas de ensayo y una de sonido que son de acceso gratuito. Sin embargo, aún quedan por pulir partes de este acuerdo para que pueda volver a ver la luz. «No puedo confirmar que se vaya a reactivar el proyecto pese a que Cristina Cifuentes lo llevaba en su programa electoral», informa José Luis Álvarez, miembro de la organización de los locales.