Microteatro

Aquí hay cebada pa´ tos

 

Detrás de algo parecido a un biombo, una cara se asoma a través de un agujero hecho en él. La idea es que parezca que se asoma desde una ventana o un balcón. La cara pertenece a la CHICA 1, que observa a tres personas reunidas en lo que se intuye es una plaza.

Esas tres personas son un chico y un señor mayor que hablan sin que podamos entenderlos, gesticulando mucho, sobreactuando, y una chica (CHICA 2) algo más joven que la anterior que recoge todo lo que escucha en un papel pegado en la pared. Los jóvenes visten de manera muy informal, mientras que el hombre mayor lleva camisa y pantalón de vestir. No hay decoración alguna. Después de unos segundos, la CHICA 1 sale de su «escondite» y se incorpora al grupo en el momento en que empieza el diálogo.

CHICA 2. Pensativa. ¿Qué pasaría si la plaza no estuviera rodeada por una verja…?

CHICO. Con acento francés. Se agarra la barbilla con gesto inteligente. ¿Y si estuviera a pie de calle, si no hubiera un cambio de cota?

CHICA 2. ¿Y qué iría debajo, la piscina?

SEÑOR. Yo creo que esto es como un gueto, aísla a las personas que estamos dentro.

CHICO. Pero también genera intimidad, no es un lugar de paso… Igual, hacerlo a nivel de la calle no es bueno: hay plazas que están a nivel y no se usan…

CHICA 1. Cortada. Yo acabo de llegar, pero mi opinión es que la gente lo ve desde fuera y no se atreve a entrar… Digamos que el espectador está arriba y esto es el teatro.

En este momento, los cuatro actores sacan una careta que tienen guardada por detrás, debajo de sus camisetas, y se las colocan. A partir de ahora hablarán siempre con ellas puestas, lo cual resultará gracioso, pues los cartones les molestan al hablar. Sus nombres también cambian a los que ponen en las caretas.

SEÑOR. Lleva una careta que pone ARQUITECTO. (Carraspea y se hace el importante): Hace unos años, unos compañeros y yo nos presentamos al concurso para la remodelación de esta plaza. Pero el concurso (dice con retintín) quedó desierto porque no éramos suficientemente famosos… Y nos dimos cuenta de que (grita) ¡sin el apoyo del mercado no podemos hacer nada!

CHICO. En su careta pone OTRO MERCADO. Sigue con su acento francés. En el de Barceló, el Ayuntamiento está informando a los comerciantes de las condiciones del nuevo mercado al que se trasladarán. Pero (dice, como confiando un secreto) hay grupos de presión: comerciantes del barrio que quieren que permanezca la zona de tiendas…

De pronto, una sirena de policía a lo lejos, cuando la canción «Veo, veo» de Teresa Rabal, procedente del parque infantil anejo, empieza a sonar tan alto que los actores tienen que hablar a voces para entenderse. La situación es bastante ridícula.

CHICA 1. (En su careta pone VECINA). El mercado languidece porque muchos comerciantes conservan alquileres de renta antigua. Algunos tienen puestos y no los usan, y esos privilegios ya no tienen que ver con la realidad…

CHICA 2. (En su careta pone ABOGADA). En el proyecto del Ayuntamiento desaparece el mercado municipal y para hacer un centro comercial. El promotor tendrá que pagar a los comerciantes porque solo podrán quedarse 20 o 30 puestos.

ARQUITECTO. Tenemos que recoger ideas individuales y de grupo. Ir de lo general a lo concreto, ¡y hacer que haya conexión entre todos nosotros!

VECINA. (Con tono revolucionario). ¡Apuntemos nuestros correos en una lista y establezcamos una agenda de reuniones!

ABOGADA: ¡Eso! ¡Y… Sellemos nuestro compromiso con sangre!

OTRO MERCADO. ¡Yo propongo desnudarnos para celebrar esta comunión!

ABOGADA. ¡Y yo que nos hagamos todos el mismo tatuaje!

ARQUITECTO: Oye… ¡¡¿Y si vamos a ocupar el Ayuntamiento?!!

TODOS: ¡¡¡Síiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!

En medio del alboroto, un borracho que lleva un rato escuchando, se acerca al grupo andando de lado a lado.

BORRACHO. Balbuceando y levantando el dedo índice. A mí me da igual lo que hagáis con la plaza, pero que haya césped, y… Si cae una cervecita de vez en cuando… Pa mear a gusto, digo…

El borracho se aleja. Los cuatro actores se quitan la careta y se miran con cara de pasmados.

[Con algunas variaciones y los recursos dramáticos del final, esta situación tuvo lugar el 13 de abril en el espacio El campo de cebaba, en la plaza de La Cebada de Madrid. La actividad forma parte del «No concurso Cebada x 3», creado por la asociación Arquitectos Sin Fronteras para que los vecinos propongan ideas para la futura nueva plaza. En junio presentarán un proyecto de reforma alternativo al del Ayuntamiento. El nombre «Cebada x 3» refleja la intención de aunar los tres usos tradicionales de La Cebada: el mercado de abastos, el polideportivo y la plaza pública.]

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