«Empapel_Ados», arte y residuo convergen en Alcobendas
A Maite Sánchez le picó el gusanillo por el arte en 2001. Se apuntó a clases de fotografía y grabado en la Universidad Popular de Alcobendas (UPA) y poco a poco empezó a formarse en ambas materias. Siguió ampliando su conocimiento, sus ambiciones y conociendo a gente interesada en el mundillo. A día de hoy, su nombre artístico es MasauR, ha convertido el arte en su forma de vida y es la presidenta de la fundación artística Asociación de Obra Seriada (ADOS).
Esta asociación es la responsable de que el pasado 15 de diciembre el distrito norte de Alcobendas amaneciera con 25 papeleras transformadas artísticamente en sus calles. Estas están enmarcadas dentro del proyecto «Empapel_Ados», que surgió como idea en el año 2016 y que vio la luz por primera vez a comienzos de 2017, cuando se instalaron las piezas artísticas en el distrito centro de la ciudad madrileña.
«Lo que hacemos es intervenir las papeleras con una acción de arte. Así, por un lado sacamos este a la calle y lo acercamos a la gente y por otro damos un toque de atención a los ciudadanos», comenta MasauR, que en esta nueva tanda, al igual que en la primera, ha sido la autora de cinco de las papeleras. Son los miembros de la propia asociación en su mayoría los artistas que intervienen las piezas. «En esta nueva tanda hemos tenido a dos grafiteros invitados que han realizado cinco papeleras entre los dos», apunta la presidenta.
El proyecto radica de un programa mayor, «Lugares Olvidados», que nació en 2008 y cuyo objetivo es utilizar el arte para realizar acción ciudadana. «Dentro del patronato de cultura se destina una ayuda a las asociaciones de Alcobendas y lo que hicieron ellos fue presentar un dossier para poder acceder a una subvención. Cada año presentan un proyecto distinto», explica Aurelio Fernández Gil, responsable de animación del Centro de Arte de la ciudad y enlace entre en Consistorio y ADOS. Dentro del programa, la asociación ha realizado diversas acciones por todo Alcobendas, desde decorar alcantarillas con sprays, hasta llenar estanques descuidados por los ciudadanos con patos de goma rosas y negros.
La primera instalación de «papeleras artísticas» levantó más revuelo del esperado. «En redes sociales comenzaron a decir que con toda la gente que pasa hambre, por qué el Ayuntamiento gastaba dinero en pagar a artistas para hacer eso. Tuvimos que emitir un comunicado explicando que ninguno de los artistas cobramos nada», comenta MasauR. Y es que el importe completo de la subvención se dedicó a la compra e intervención de las papeleras. Aun así, la acogida ciudadana ha sido más que positiva. «Con lo poco que se promociona el arte, esta es una manera de que los chavales vean que el arte no es solo ir a museos», comenta Mercedes, vecina del distrito centro de Alcobendas.
Asimismo, las obras urbanas han sobrevivido a la vandalización. MasauR comenta que las papeleras modificadas no han sufrido pintadas, así como tampoco han sido víctimas de patadas o golpes, cosa que otras papeleras de la ciudad sí.
Ocho artistas y 20 papeleras
Un total de ocho artistas han participado en la intervención de las 25 papeleras. Soledad Pulgar colabora con ADOS desde hace dos años. Esta artista es la autora de cinco de las piezas instaladas en el distrito norte. «Lo que buscaba era llamar la atención de los ciudadanos, por eso la obra se llama Reflexiones desde el color, en la que mi intención era utilizar formas geométricas y colores para crear sinergias», apunta Pulgar sobre su obra, que está realizada con figuras generadas por ordenador y se adapta a las papeleras por una impresión digital.
Por su lado, la artista Czili, también miembro de la asociación, utiliza la técnica de la escultura sobre las piezas. «Aprovecho la utilización del vacío, el hueco del cilindro de un mobiliario urbano para sensibilizar la conciencia a cualquier espectador con quien se comparta un hábitat común. Espero que este vacío se llene virtuosamente no solamente en la estética, sino también en la calidez de las acciones humanas», comenta la artista.
Los dos invitados por la asociación, los grafiteros ZZZ y Zeok13, son los autores de algunas de las piezas más curiosas de la colección. El primero es el autor de Naturaleza Artificial, en la que, como explica el mismo artista, «intento invitar a una reflexión sobre lo natural y lo artificial, una dicotomía a la que en muchas ocasiones no le damos la importancia necesaria, incluso llegamos a no diferenciarla». Por su lado, Zeok13 es el responsable de Comida Basura en la que maximiza el uso del soporte proporcionado. «He querido dar el lugar que se merece a la comida rápida que tan bien vista está en nuestro entorno pero que cada año no sólo provoca enfermedades de obesidad, sino que también genera toneladas y toneladas de basura», explica el grafitero.
Cuatro áreas implicadas
Fernández explica que la implicación del Ayuntamiento en el proyecto ha crecido de una tanda para otra. En el primer plan, en el que se instalaron 15 papeleras en la zona centro, las piezas tuvieron que adquirirlas la asociación con el propio dinero de la subvención. Tras llamar la atención de distintas áreas del Consistorio, en este segundo proyecto la intervención ha llegado desde varios puntos. Aurelio Fernández explica que en este caso, las piezas han sido proporcionadas por el área de vía pública, la subvención emitida por el programa de apoyo a las asociaciones se ha dedicado a la parte artística (impresión en vinilo y materiales), comercio se ha responsabilizado del pago de las placas identificativas de cada obra, que especifican el nombre de esta y el autor, y el mismo Centro de Arte ha sido el encargado tanto de la coordinación del proyecto como de la instalación de las papeleras. El área de comercio, por su lado, llegó a un acuerdo para que todas las obras estén situadas en zonas comerciales. «Han colaborado áreas del Ayuntamiento que normalmente no trabajan con nosotros», explica el responsable del Centro de Arte.
«ADOS tiene planes de transformar otro tipo de mobiliario urbano, como contenedores. La intención es intentar llegar a todos los distritos de Alcobendas», comenta Aurelio Fernández. La asociación, que suele realizar anualmente dos proyectos, una exposición en el Centro Cultural Anabel Segura y una intervención enmarcada en «Lugares Olvidados», no tiene ninguna intención de dejarlo. «Todo el mundo está encantado y estoy seguro de que seguirán con el proyecto», concluye Fernández.